¿Cómo surge este proyecto de Pardelión Music TV?
Nosotros tenemos una productora audiovisual. Desde que arrancamos fuimos por dos caminos paralelos. Por un lado, el camino de la publicidad institucional y todo lo relacionado con el lenguaje audiovisual. En paralelo tuvimos algunas experiencias en el medio digital haciendo algunos videos que se convirtieron en virales, como el “43 millones hinchando por Uruguay” del pasado Mundial o el test oficial en la farmacia, que fue en diciembre de 2013 cuando se legalizó la marihuana.
Nos dimos cuenta de que los videos virales están buenísimos pero son muy efímeros. Queríamos construir algo distinto a partir de nuestra experiencia, algo que no sea tan viral pero que pueda ir creciendo, aunque sea lentamente, y generando una audiencia. De ahí surge la idea de armar un canal.
Hubo una experiencia en Villa Serrana con una chica llamada Eco López a la que escuchamos una noche. Era una vecina que llegó con una guitarra y se puso a tocar. Fue un momento genial; lo filmamos y lo subimos a Youtube. Quedó un video de pura oscuridad pero que se transformó en el cimiento de lo que nos dimos cuenta de que queríamos contar en cuanto a experiencia musical en el canal.
Ustedes cuentan en su sitio web que los artistas interpretan las canciones en un formato que promueve la simpleza y la intimidad. ¿Cómo se logra esto?
Para nosotros el formato fue algo muy importante. Por un lado están los videoclips, que son tomas de sonido hipertrabajadas en estudio y con una representación visual y videoarte por encima.
También están los toques en vivo, en los que los músicos tocan para un público pero las cámaras se ubican de una forma tal que esa interacción no molesta.
Este proyecto viene a ponerse en el medio de estos formatos porque para nosotros lo importante es que los músicos toquen para las cámaras. Esto permite que desde el sillón de tu casa vos puedas estar en la intimidad con estos músicos.
El formato lo logramos generando una instancia previa al rodaje en la que los músicos vienen un rato antes, se improvisa con algo de música, tomamos y comemos algo, estamos tranquilos, hay inciensos, los músicos y técnicos están descalzos. Se trata de generar un momento. Cuando el músico se siente listo, se graba la canción.
En paralelo está el tema de los lentes de las cámaras, que son de fotografía, y generan la sensación de que uno se está acercando y moviendo entre los músicos a distancias que no son habituales en este tipo de videos.
¿Ustedes identificaron que había una carencia de este tipo de formato en el plano audiovisual uruguayo?
El interés en hacer el canal tenía que ver con nuestro amor a la música y con las ganas de hacer un proyecto juntos entre un montón de personas que trabajamos en publicidad.
Llegado el momento nos pusimos a pensar que si íbamos a hacer un canal de música cómo podíamos hacer algo distinto, con un valor agregado.
Hicimos varias investigaciones. Buscamos a artistas uruguayos por Youtube para ver qué no había y podía interesarles. Vimos encuestas, estuvimos conversando con varias personas. Vimos que hoy en día los músicos uruguayos no cuentan con contenido online porque es caro. Nos dimos cuenta de que había un espacio para hacer contenido para los artistas. Además porque estamos en la generación post MTV, en la que el video ya es como parte de la música.
Nos parecía genial mostrarlos tocando canciones a ellos mismos y ver qué los hace talentosos y no tener que apelar a imágenes de archivo o representaciones de videoarte
Basan el proyecto en un modelo gratuito. ¿En algún momento piensan modificarlo?
Sí. La idea fue arrancar mostrando lo que podíamos hacer. Aquí trabajan entre 25 y 30 personas porque les interesó el proyecto. Esta forma de trabajo nos generó muchas reuniones con muchas marcas, agencias y canales digitales y estamos buscando una forma de poder [financiarlo] sin que esto termine ensuciando el producto o modificando la idea inicial.
