Quería ayudar a los más necesitados, pero sentía que la colaboración sería temporal si no encontraba la manera de disfrutar del proceso. Así llegué al periodismo, con la ilusión de darle voz a los que no la tienen para que más gente conozca sus padecimientos.
A su vez, siempre tuve curiosidad por los demás: los vecinos, los diferentes, los de otros religiones, culturas e idiomas. Me fascinaba la idea imaginaria de sacar un tema de un bolillero y saber, al menos, un poquito de cada tópico.
Los deseos se unieron en un viaje por el mundo sin destinos prefijados ni plazos limitados: salí a conocer sin pensar en dónde ni cuánto. Dos días antes de partir decidí compartir esta experiencia en plataformas digitales para que otros pudieran vivirlo conmigo. A la Vuelta nació como una bitácora de viajes pero rápidamente se convirtió en un canal de comunicación que mostraba las distintas caras de los destinos que visitaba.
El emprendimiento que impulsamos junto a mi hermano mostró la belleza de Australia pero también su conflicto entre aborígenes y descendientes de británicos; la espiritualidad de la India pero también su pobreza extrema y su insoportable hacinamiento; contamos historias de paz en Medio Oriente, de hospitalidad con el extranjero en Rusia y de abusos en Singapur, el país perfecto del sudeste asiático.
El periodismo digital me permitió cumplir mi sueño de viajar por el mundo sin abandonar mi profesión. A la Vuelta es el resultado de las inquietudes que sentimos al viajar y de ver que los países tienen realidades diferentes a las que suelen ver los turistas. A la Vuelta significa conocer más que visitar; informar, cuestionar y analizar más que pasar de camino.
Una de mis preocupaciones a la hora de salir de viaje fue el futuro de mi carrera, pero el desarrollo del periodismo digital me permitió crecer todavía más que si me quedara en Uruguay con el trabajo que tenía. Mi futuro se dibuja esperanzador: siento que cuento con versatilidad para trabajar en contextos, culturas e idiomas diversos, algo crucial a la hora de procesar información para ponerla en contexto. Mi ilusión de ejercer el periodismo para ayudar a construir un país y un mundo mejor está más firme que nunca.
Nicolás Kronfeld es estudiante avanzado de la Licenciatura en Comunicación Periodistica de la Universidad ORT Uruguay. Comenzó su carrera profesional en Espectador.com. En Uruguay trabajó para los diarios El País y El Observador, y para la revista Seisgrados. En los últimos tres años trabajó desde distintos países para el diario español El Confidencial y los programas radiales No Toquen Nada y Justicia Infinita de Océano FM.
