Álvaro Moré —presidente de Young & Rubicam, Grey y Wunderman— fue el primero de los cinco oradores. Contó que cuando él tenía 17 años, se enteró que una agencia de publicidad estaba buscando un cadete con moto. Al entrevistarlo, le explicaron qué era una agencia; “me empezó a gustar”, dijo. “Y cuando la persona que me estaba entrevistando me pidió que dijera algo sobre mí, le dije: ‘si usted me explica una vez lo que tengo que hacer, no me lo va a tener que explicar más’. Y me dijeron ‘Empezás mañana’.”
“Cada cosa que ustedes hacen les va dando una ventaja”, afirmó, y les dijo a los futuros estudiantes: “Creo que todos ustedes que vinieron hoy, le están sacando una ventaja a todos los que no vinieron. Y es así como suceden las cosas”.
Guillermo Varela dirige Handsoft S.A. desde hace 15 años, desde donde desarrolló soluciones para más de 100 empresas y 12 países. Actualmente dirige varios proyectos digitales como Yamp! y gOOva.
“Todo lo que yo hago, todo lo que hacen mis empresas, no existía cuando yo estaba sentado ahí”, confesó quien hoy se dedica a los contenidos digitales. “No era ni una especie de edificio en construcción, no existía ni el concepto ni la idea ni los profesores ni las materias. Por lo cual, probablemente exista la chance de que algunas de las cosas que ustedes van a vivir o van a hacer profesionalmente aún hoy no existan”.
Varela advirtió sobre una postura que se nota cada vez más, a su criterio: “un discurso que viene de otras áreas, no de la académica, que busca apoyar la idea de que estudiar, ser un profesional, no tiene tanto valor, no es tan meritorio”. “Tienen que huir de esa idea por falsa, eso es una mentira absoluta”, afirmó.
Valeria Bolla es licenciada en Comunicación Social, formada en periodismo. Las herramientas que adquirió en la carrera, sumadas a las de la práctica profesional del trabajo, las usó para reinventarse en comunicadora corporativa, según narró. Hoy día, es la responsable de comunicaciones del Banco Mundial en Uruguay.
“Yo quería ser veterinaria. Siempre quise serlo. Hasta que tocó abrir el sapo”, contó. “Ahí supe que no iba a ser veterinaria pero no sabía que iba a hacer. Y tenía un hobbie: me encantaba escribir y leer. Siempre esperaba que se terminaran las tareas para dedicarme a mi hobbie: escribir y leer”.
“Si tienen una vocación, síganla”, aconsejó. “Prepárense, tanto para la entrevista como para el trabajo. Resuelvan, equivóquense. Sepan lo que está pasando. Piensen fuera de la caja, piensen cosas diferentes. Escuchen más de lo que hablan. Tengan los pies sobre la tierra: la planificación es muy importante, pero la flexibilidad también. Sepan decir que no. Conozcan a mucha gente y escuchen lo que dice. Especialícense. No hay nada de esto para siempre: la comunicación es gigante”.
Claudio Paolillo es director del semanario Búsqueda desde el 1º de enero del 2010 y miembro del Comité Ejecutivo de la Sociedad Interamericana de Prensa SIP, donde preside la Comisión de Libertad de Prensa e Información desde octubre del año 2012. Debido a sus tareas en este Comité, debió viajar a Francia y dejó su mensaje en un video para los futuros periodistas.
“El periodismo se compone de dos factores, pasión y adrenalina. Pocos trabajos como este nos permiten gritar goles como si estuviéramos en el estadio, cuando damos una noticia”, comentó. “En periodismo nadie se aburre porque todos los días llegamos al trabajo sin saber de qué vamos a escribir, a quién vamos a entrevistar. Todos los días es diferente”.
¿Qué puede aportar un periodista cuando las tecnologías aplicadas a la información se multiplican todo el tiempo?, preguntó. “¿No tenemos ya toda la información en las redes, en internet?”, continuó. “Les aseguro que en esta época los periodistas pueden aportar muchísimo, porque las esencias del buen periodismo importan cada vez más, más que nunca. Alguien tiene que hacer el trabajo de separar la paja del trigo”.
Mariana Secco es productora de cine, fundadora y directora del Departamento de Cine de Salado. En 2010, Variety la distinguió como uno de los 10 talents to watch. Como productora y distribuidora, participó en Mr. Kaplan (Álvaro Brechner), Relocos y Repasados (Manuel Facal), Artigas (César Charlone), Reus (Alejandro Pi), Ojos Bien Abiertos (Gonzalo Arijón) y La Cáscara (Carlos Ameglio).
Estudió comunicación con opción Publicidad y trabajó en agencias de publicidad en la parte de cuentas y de producción. Más adelante trabajó junto a Emma Sanguinetti en una sala cultural y luego en una agencia de Prensa y Relaciones Públicas. Cuando entró a trabajar en Salado, junto a uno de los dueños decidieron crear el Departamento de Cine. “Sabía poco, había muy poca gente que estaba produciendo cine en ese momento, fuimos aprendiendo a medida que hicimos la primera película, que fue La cáscara”.
La productora recomendó encarar esta profesión “con ganas”. “Es un trabajo muy interesante, uno de verdad tiene que hacerlo porque le interesa el cine, el audiovisual, por amor a lo que es la carrera, uno tiene que ser un apasionado. Uno tiene que estudiar, por supuesto, pero también tiene que leer Variety, tiene que estar al tanto de las películas que se estrenan en el mundo, no solo de las americanas que vienen a Uruguay, tiene que averiguar los países con cinematografías emergentes, qué dice la prensa de esas películas, quiénes son esos productores, quiénes están trabajando en Los Ángeles, por qué la industria ha llamado a técnicos y artistas latinoamericanos para trabajar en Hollywood…”.