César di Candia nació en Florida en 1929. Trabajó como periodista en el diario El País, El Dedo, Guambia, La Mañana, Marcha y el Semanario Búsqueda, entre otros. Publicó, además, decenas de libros. Hoy en día reside en La Paloma, departamento de Rocha.
El lunes 24 de octubre visitó la clase de Introducción al Periodismo, dictada por el docente Juan Pablo Mosteiro, donde compartió anécdotas de su experiencia como periodista.
“Hay que describir y no opinar porque el lector debe sacar sus conclusiones”, dijo a los estudiantes. “Creo que un periodista debe saber limitarse, porque lo que se escribe es muy peligroso: es muy peligroso para el país y para las autoridades”, comentó.
Sobre su método para entrevistar, dijo que nunca lleva escritas las preguntas y que lo ayuda su memoria. Sin embargo, destacó el trabajo de Ma. Esther Gilio —periodista, escritora, fallecida en 2011—. “Tenía un cuadernito donde el día anterior escribía las preguntas, no sé, treinta preguntas. Le salían bien los reportajes, es una técnica que no debe ser repudiada. Hacía unas entrevistas increíbles”.
“La pregunta directa y la pregunta medio insolente, porque vamos a decir la verdad, hay preguntas medio insolentes, excesivas, un poco fuera de tono, más allá de lo que uno debería preguntar… a la gente le encantan; yo las empecé a hacer a los 60 años”, remarcó. “Hay un tema de respeto cuando uno empieza a trabajar. Cuando tenés 60 años, 70 años, te animás a preguntar cualquier cosa”.