El Festival Internacional de Cine de Guadalajara dio a conocer sus ganadores. El mejor cortometraje iberoamericano fue Bodas de oro, dirigido por Lorenzo Tocco, estudiante avanzado de la Licenciatura en Comunicación Audiovisual.
El jurado entendió que Bodas de oro merecía el premio “por ser una comedia efectiva que trabaja el formato corto a partir de una historia cotidiana, muy bien dirigida, narrada y actuada”.
Se cuenta la historia de un matrimonio que cumple 50 años de casados y decide celebrarlo. La pareja “contrata como un servicio audiovisual que se encarga de registrar el evento y tomar testimonio de los familiares y amigos: hijos, nietos, amigas de ella, amigos de él…”, narró Tocco. “Estas personas empiezan a hablar un poquito de más y generan pequeños conflictos porque los testimonios se transforman en confesiones, digamos. Empiezan a salir trapitos al sol. Esa es como la premisa inicial del cortometraje”.
Tocco escribió el primer borrador en el año 2015, lo presentó a los fondos de la Dirección del Cine y Audiovisual Nacional (ICAU) y obtuvo una mención especial. “Eso estuvo buenísimo pero no nos servía para filmar, entonces nos seguimos presentando hasta que en 2017 nos dieron el fondo”.
Básicamente, lo que me inspiró fueron un montón de situaciones personales, tanto de mi familia como ajenas, donde siempre pasaba lo mismo: una acción chiquita, una palabra mal dicha en el momento inadecuado, un comentario fuera de lugar que terminaba generando un caos familiar. Era jugar con esa sensación de que en esas celebraciones, donde todos pretendemos que nos queremos y hay una cuestión de armonía muy falsa, muy hipócrita, en realidad lo que hay es una cuestión de supervivencia para que la familia siga existiendo en términos pacíficos. Todo esto es una mentira, como una puesta en escena que armamos para sobrevivir, pero en realidad todos nos odiamos con alguien, tenemos un tío o una tía segunda que no podemos ni ver, o un amigo al que le tenemos un poquito de rencor por alguna situación de antes.
La risa como clave
Cuando terminaron el cortometraje, dice su director, se plantearon ciertos objetivos respecto a los festivales más grandes. “Y Guadalajara era como 'el' festival en Iberomerica”, reconoce. “Si quedábamos, bien. Si no, bueno”.
Quedar seleccionados para la competencia de cortos fue una alegría muy grande para todo el equipo: objetivo número uno cumplido. Y estrenar en Guadalajara fue tremendo: poder mostrarlo ahí era como un objetivo recontracumplido.
Comentó que estaba nervioso por el público que iba a ver el corto, dado que Bodas de oro es una comedia. “Solo puede funcionar si la gente se ríe. No hay otra mirada posible. Y como la comedia es muy cultural, muy cambiante de país a país, estaba ese miedo de estrenarlo y que la gente no se riera de ningún chiste. Eso no estaba bueno, más allá de estar en Guadalajara”.
Pero eso no pasó. En cinco programas, el festival proyectó 39 cortometrajes. “Nosotros cerramos el programa del lunes. Y la gente se rió, se rió de verdad. Acá en Uruguay se lo había mostrado a mi familia y a mis amigos, y el público del festival se rió mucho más que ellos, que de última se tenían que reír por compromiso”.
Tocco dice que, en esa instancia, ya estaba “muy conforme, no necesitaba más nada”. En el espacio de intercambio con el público, las preguntas iban por los aspectos técnicos del cortometraje, además de felicitar por las actuaciones y el guion. “Ya está, qué más quiero, no puedo pedir más nada…”.
Bodas de Oro (The Anniversary) - TRAILER from Lorenzo Tocco on Vimeo.
“Cuando ganemos…”
Desde que escribió el guion, Tocco dijo que el cortometraje se planteó como 100 % de los actores: “La importancia y el peso estaba puesto en la actuación”. En ese sentido, comentó que “lo que más reconocen es la narrativa, la dirección y el trabajo de los actores”.
Tocco y la productora, en plan chiste, siempre hablaban de qué pasaría cuando ganaran el premio. “Como broma, cuando ganemos…”, dice, al tiempo que reconoce que no estaba en los planes.
Eran 39 cortos: estaba el que había ganado el Goya en España, otro con un director nominado cinco veces al Goya, otro mexicano con dos actores de Netflix, uno de La casa de las flores y una actriz como de medio millón de seguidores en Instagram. Ese mismo corto tenía un dragón hecho por computadora, animado, que no tenía nada que envidiarle a un dragón de Game of Thrones…
El nivel era muy alto, enfatizó el director uruguayo. “Nuestro objetivo era que el corto funcionara, que la gente lo viera y se riera. Nunca pensé que íbamos a ganar el premio, fue una sorpresa hermosa”.
En su agradecimiento en el festival, Tocco aprovechó para reconocer el apoyo de su familia y de sus amigos. Quienes están en el entorno cercano, dijo, se convierten en los actores de “las primeras y las peores cosas” que hacen, “las más difíciles de ver”.
Para estudiar en ORT, Tocco postuló al concurso Yo propongo, donde había que presentar un cortometraje. “A los 16 años, agarré la cámara típica de viajes SONY y lo que hice fue un corto de suspenso con mi hermana como protagonista”. Finalmente, ganó una beca para estudiar la Licenciatura en Comunicación orientación Audiovisual. “Básicamente, si mi hermana no actuaba en ese corto, yo no tenía posibilidades ni de filmarlo”.